martes, agosto 31

arquitectULa



Desde hace ya unos días, en el primer piso del pabellón R de la universidad se ha montado la exposición de trabajos de los alumnos de la carrera de arquitectura.

Soy sincero y admito que aun cuando me había percatado ya antes, no me había tomado la molestia de detenerme a ver lo que había. Al menos no al detalle. Pero aunque sea porque me mandaron a hacerlo, la vi y por eso me permito escribir esto.

En dicha exposición podemos ver tanto dibujos hechos a mano, colocados en paneles a los extremos del hall, como 16 maquetas (de un material que hasta ahora me cuestiono qué será porque, evidentemente, no se pueden tocar), cada una de ellas con una temática diferente.

Los dibujos en los paneles muestran estructuras vistas desde espacios y ángulos diferentes coloreadas de manera armónica (casi todas). Paso la vista una y otra vez por cada dibujo y lo único que me viene a la mente es: “Aaaaaala…yo ni cag… la hago”. En realidad no lo sé. No lo he intentado. Pero creo que por algo no estoy en arquitectura.

Las maquetas están distribuidas en cuatro zonas según la temática que guarden: forma (no muestran algo específico), fundamentos (tienen algo más de intención de presentar una forma pero sigue siendo “abstracto”), refugio – persona (más cercano a lo la percepción nos dice que es un edificio propiamente dicho pero aún falta algo), espacio apropiado (edificio ya logrados o más cercanos a los que solemos llamar como tales).

Si bien, dentro de lo poco (por no decir casi nada) que conozco de arquitectura, considero que muchas de ellas son excesivamente extravagantes o a mi parecer poco funcionales, cada una de ellas y una más que la otra me parecieron tremendamente interesantes.

Sé que cada una de ellas tiene una razón de ser y que para cada uno de los creadores cada espacio y cada cosa colocada en cada lugar significa algo. Más allá del hecho de crear un edificio, siento que buscan plasmar su yo interior en una forma geométrica.

¡Vao pa’ Mistura…familia!


En la imagen podemos ver a Gastón Acurio, principal representante de la gastronomía peruana, saludando amistosamente a una señora de tez morena que tiene un puesto de comida, evidentemente de comida criolla, en la ya tradicional feria gastronómica que se llevó a cabo en el Parque de la exposición.
Este instante es fotografiado por periodistas y curioso que, por sus expresiones, dejan ver lo ameno de la situación que ha sido inmortalizada para siempre. Es un hecho que escenas como estas motivan tanto a cocineros como a amantes de la cocina a seguir participando de tan gratificante evento.



Por otra parte, es interesante ver que la vestimenta de la cocinera tiene los colores patrios y que va a la par con la decoración del local y los productos para vender colocados sobre el mostrador.



Sin lugar a duda, escenas como esta, pero sobre todo el maravilloso sabor a bajo precio, nos hacer esperar con la boca hecha agua la llegada de este evento cada año.

Cien años de luchas pero nunca de soledad.


Todos conocemos a Gabriel García Márquez o simplemente Gabo. Pero conocemos al de ahora. Al actual. A aquel grandioso escritor cuyos numerosos libros se venden por montones y han sido traducidos a varios idiomas. Al exitoso literato ganador del premio Nobel en 1982. Pero nunca nadie piensa en él como un hombre que en algún momento tuvo que pasar innumerables penurias para llegar a ser quién ahora es. Para lograr la fama que ahora lo cobija.
Pues, sí. García Márquez, como muchos otros hombres de letras, tuvo que luchar desde abajo para poder consagrarse. Tuvo que vencer un sin número de obstáculos para poder publicar sus novelas.



La novela detrás de la novela nos cuenta cómo Gabriel tuvo que hacer muchos sacrificios para publicar la que es su obra maestra: Cien años de soledad. Narra de qué modo Gabo luchó por alcanzar la publicación de esta. Sin embargo, jamás estuvo solo. Tuvo siempre a su mujer acompañándolo y apoyándolo a cada instante. Pero además de ella, estuvieron sus amigos. Amigos que, realmente haciendo gala de ese título, estuvieron con él de manera incondicional. Lo apoyaron no sólo en lo económico sino que también moralmente.



La verdad que me sorprendió sobre manera ver como su esposa, pero sobre todo sus amigos jamás lo dejaron solo. Siempre confiaron en el éxito que su novela tendría. Y no se equivocaron. Su apoyo no cayó en un saco sin fondo. Por demás está decir que por el inigualable talento que Gabo tiene pero también por la humildad y la sencillez de este. Valores que hasta ahora conserva. Valores que lo hacen ser considerado, con mayor razón, un grande.

Él es.


¿Cuántas veces escuché el nombre “Eloy Jáuregui” en la televisión? La verdad no recuerdo. Pero lo que sí tengo grabado en mi memoria son aquellos comentarios llenos de sarcasmo que me arrancaban carcajadas frente a preguntas a veces estúpidas, a veces no tanto, acerca de algún “gran” acontecimiento suscitado en nuestra ciudad. Me sorprendía la agudeza e inteligencia de sus respuestas en cada entrevista. Un genio.
Aparte de un hombre inteligente y, por demás está decirlo, culto, el profesor, perdón, MAESTRO, como dice que le gusta ser llamado, es extremadamente gracioso. Siempre tiene el comentario preciso para lograr una risotada en plena clase o en cualquier momento. Sé que a muchos, o mejor dicho muchas, les afecta el doble sentido (aunque yo lo llamo ingenio) que siempre tiene a flor de boca pero, ¿qué podemos hacer? Eso también es parte de lo que es Eloy.

Es amante de la buena música. La clásica, el jazz, la música peruana y al parecer la salsa. Se declara fan de la gran Tania Libertad.

Disfruta de crear. ¿Qué crea? De todo. Según dice anda todo el día creando, imaginando, produciendo siempre algo nuevo y considera que eso es lo que debe hacer todo comunicador. La cultura, la información y la creatividad son los tres pilares que sostienen a un gran comunicador.

Finalmente, es un gran aficionado al fútbol e hincha de Universitario de Deportes. ¿Qué podemos decir de esto? Nada que cuestionar: es un hombre inteligente.

Sé que existe aún más detrás de Jáuregui. Mucho más de esa sencillez, sinceridad, pero sobre todo inteligencia y cultura que darnos.

Si bien hasta el momento de matricularme no sabía que enseñaba en la universidad y tampoco imaginé que me enseñaría, no puedo nega0r, fuera de sobonerías, que es un privilegio que sea un MAESTRO de la de Lima.

Algo de mí.


1. ¿Qué otra cosa hace además de estudiar en U. de L?


Practico varios deportes (fútbol, vóley, béisbol) sobre todo los fines de semana. Eventualmente, trabajo como intérprete del idioma japonés y también en eventos (tanto en la producción como de anfitrión).


2. ¿Qué hizo en sus vacaciones? ¿Estuvo a gusto?


Como cada tres años en vacaciones, viajé a Japón a visitar a mis padres y a hacer trámites. De paso conocí a mi sobrina de seis meses(hija de mi hermana menor) y la apadriné. Está linda.


3.¿Qué diarios y revistas lee cotidianamente?


No suelo leer revistas seguido (eventualmente Men Health), pero leo el diario Correo y algunas veces El Comercio – online.


4.¿Qué programa de TV observa con frecuencia?


Usualmente, sólo veo noticieros, tanto por la mañana como la noche, y El Francotirador.


5.¿Que emisora de radio escucha?


No suelo escuchar radio.


6.¿Cuál es la última película que vio?


Fueron las que había en el avión. Just Wright, The book of Eli y otras más.


7.¿Qué libro ha leído este año? ¿El anterior?


Varios. “El cojo y El Loco”, “Morirás mañana” de Jaime Bayly y “Todos los nombres” y “Levantado del suelo” de José Saramago. Me gusta leer novelas. Quizá muchas de ellas de contenido trvial o superficial pero considero que mientras lea todo está bien.


8.¿Qué espot publicitario (Perú) lo impactó este año?


Sin ninguna duda, el de pinturas CPP. “La Tumbo…!!!”. No sólo por lo gracioso y pegajoso de la frase, sino también porque el concepto creativo me pareció interesante, divertido y, sobre todo, fácil de entender.


9.¿Dónde vive? ¿Le gusta? ¿Se mudaría y a dónde?


Actualmente, vivo en el distrito de Miraflores cerca al óvalo y el Parque Kennedy en un departamento alquilado. Anteriormente, vivía en San Miguel en la casa de mis padres pero como se metieron a robar y estaban tanteando volver a hacerlo, me mudé.


10.¿Por qué estudia Ciencias de La Comunicación?


Porque cuando terminé mi carrera de administración hotelera estuve trabajando en una productora de eventos y me di cuenta de que me gustaba el tema de marketing y la publicidad. Aunque todavía no estoy seguro de si eso será por lo que mi inclinaré, puesto que me atrae también la rama de empresa y desarrollo.


11.¿Cuál es su proyecto al terminar su carrera?


En principio, me gustaría trabajar en alguno de los hoteles 5 estrellas en Lima. Esto, evidentemente, para poner en práctica mis dos carreras. La idea que tengo es la de dedicarme al marketing hotelero y eventualmente turístico. Tengo entre mis planes también el de viajar a Portugal para hacer una maestría en marketing o estudiar la carrera de producción de eventos en una universidad Argentina.


Finalmente, me gustaría tener una empresa ligada a alguno de estos rubros.